Tema 2: Los principios de la conducción

En esta unidad aprenderemos:
El funcionamiento mecánico del vehículo y los sistemas que lo componen, iniciando por el panel de instrumentos y sus principales testigos, luego veremos el funcionamiento del motor y los frenos, también la importancia de los neumáticos y las luces. trataremos otros factores presentes en la conducción como la distancia de detención y reacción, además de los elementos de seguridad pasiva y activa.

Vídeo de la unidad
Abrir Índice




2.1 Funcionamiento del automóvil

(Temario actualizado: agosto 2024, en base al Nuevo Libro para la Conducción en Chile)

Para conducir de manera segura, es crucial mantener tu automóvil en buenas condiciones. Para ello, es fundamental que comprendas cómo está construido y cómo funcionan sus componentes principales. 

Para empezar, debes familiarizarte con el panel de instrumentos, ya que es el medio de comunicación diseñado para informarte sobre el estado de los principales sistemas del vehículo.

Testigos color verde: Indican la puesta en funcionamiento.

Testigos color rojo: Informan atención inmediata, avería grave.

Testigos color amarillo o ámbar: Advierten sobre un posible problema a revisar.

Tacómetro: Velocidad del motor en revoluciones por minuto

Indicador de combustible

Indicador de temperatura del líquido refrigerante

Odómetro: Indica la distancia total o parcial recorrida por el vehículo.

Velocímetro: Mide y muestra el valor de la rapidez instantánea del vehículo.




Es indispensable para todas las personas conductoras conocer el funcionamiento de su automóvil, como está construido, cuáles son sus principales partes y funcionalidades, además de las posibles fallas y medidas que debe tomar ante ellas, como también la correcta utilización de todos los elementos de seguridad en el marco de una conducción responsable para el bien de todos.


El motor

  • Importancia y ubicación: Es el elemento más importante, es decir el corazón del automóvil. Normalmente se ubica en la parte delantera de este, aunque en algunos casos está situado en la parte de atrás, actualmente en automóviles de alta gama.
  • Combustible: Los vehículos particulares funcionan mayoritariamente con gasolina (bencina), algunos para el trabajo funcionan con petróleo diesel como buses, camiones y camionetas y de forma excepcional existen vehículos que funcionan con gas, como algunos taxis. Además, en Chile se ha impulsado la Política Nacional de Electromovilidad, centrada principalmente en el transporte público y flotas comerciales.
  • Funcionamiento: Se mide por la cantidad de giros del motor en un minuto, técnicamente se indica con la sigla RPM “Revoluciones por Minuto” las cuales son indicadas por el tacómetro, consistente en un reloj digital o análogo situado en los tableros de los vehículos.


El sistema de lubricación

Se trata del sistema encargado de distribuir aceite a todas las partes móviles dentro del motor con el objetivo de reducir el desgaste y la fricción entre las superficies de los componentes. Esta distribución se realiza a presión y cuando este procedimiento falla, es decir, cuando el motor no está siendo correctamente lubricado, se enciende en el panel de instrumentos la luz indicadora de la presión de aceite, lo que indica que el nivel de aceite es bajo. Si esta se enciende, debes detener el motor de inmediato y no ponerlo en marcha hasta haberlo reparado, ya que le puedes causar averías graves.

Te recomendamos controlar el nivel de aceite y agregar más si el nivel está bajo. Además, cambiar periódicamente el aceite y el filtro, según las recomendaciones del fabricante del vehículo. Utiliza aceites reconocidos y no olvides controlar los sellos de los envases.



Es muy importante que:
  • Verifique el nivel de aceite de la varilla, que se encuentra en el motor.
  • Cambie periódicamente el aceite y el filtro que le corresponda.
  • Use aceites recomendados por el fabricante.

Sistema eléctrico del automóvil

Los principales elementos y funcionamiento del sistema eléctrico son:

  • El alternador es el encargado de producir la energía eléctrica, este entra en movimiento a través de una correa del motor.
  • La energía producida se almacena en la batería.
  • Si la correa está poco tensa, el efecto del alternador se minimiza.
  • En el tablero una luz se enciende cuando la batería tiene poca carga.


Posibles fallas y sus causas, en el sistema eléctrico:

Fusible fundido: Los fusibles impiden incendios y deterioro del sistema eléctrico. Cuando falla algún componente eléctrico, comúnmente se funde un fusible, por ello es necesario revisar y reemplazar.

Ampolleta quemada: si el intermítete en el tablero está más rápido o alguna luz no enciende, es posible que se deba a una ampolleta quemada.

Batería mal cargada: Cuando la batería está mal cargada el motor del vehículo tiene dificultades para encender al darle contacto, especialmente con bajas temperaturas (invierno).

Batería descargada: Si el motor no arranca, es debido a que la batería se encuentra totalmente descargada.

Es muy importante que:
  • Agregue solamente agua destilada si el nivel de líquido de la batería es bajo.
  • Compruebe que la correa este bien tensada.
  • Si la luz de batería en tablero enciende mientras conduce, es debido a que existen problemas de carga.
  • Compruebe que los cables estén bien ajustados en las bornes de la batería.
  • El líquido de la batería es corrosivo, tenga cuidado con su piel y ropa.

El sistema de combustible

Este sistema es el encargado de suministrar combustible al motor para su correcto funcionamiento. Si al conducir sientes un fuerte olor a gasolina debes detenerte para investigar la causa del problema. Así puedes prevenir el riesgo de incendio en tu vehículo.



AL CARGAR GASOLINA, RECUERDA:

  • Apagar el motor del vehículo.
  • Evitar la inhalación de vapores emanados por la gasolina.
  • No encender cigarrillos.
  • No hablar por celular. 
  • Recuerda usar el octanaje adecuado al motor de tu vehículo, según las indicaciones del fabricante. 

RECOMENDACIONES PARA REDUCIR LA CONTAMINACIÓN ASOCIADA AL COMBUSTIBLE:

  • Evita la apertura de la tapa más veces de lo necesario.
  • Los vapores de la gasolina pueden ser cancerígenos.
  • Evitar frenadas y aceleraciones frecuentes ya que causan alto consumo de combustible.


Cuando el motor esté frio:

  • En los vehículos modernos el sistema es automático gracias a un microprocesador, modelos anteriores cuentan con un regulador automático para reducir la cantidad de aire de la mezcla.
  • Los autos más antiguos, funcionaban con un regulador o cebador (“chupete”) manual para disminuir la cantidad de aire.

El sistema de refrigeración

Este sistema tiene la misión de enfriar el motor para mantener la temperatura adecuada durante su funcionamiento. Este proceso utiliza un líquido refrigerante (agua destilada más un anticongelante) que circula de manera constante por canales en el bloque del motor y pasa desde ahí al radiador.


Cuando hay una obstrucción del sistema de refrigeración, poco líquido refrigerante y/o una correa de la bomba de agua rota o mal tensada, la temperatura del motor se eleva.

Si esto sucede, debes detener la marcha y reparar la avería.

Hoy en día, la mayoría de los vehículos tiene ventilador eléctrico que se activa al subir la temperatura (especialmente al circular a baja velocidad). Si esto no sucede, puede deberse a un contacto defectuoso, que la correa del ventilador esté dañada o a un fusible dañado.

También es importante destacar que, a temperaturas bajo cero, el líquido refrigerante debe contener una cantidad suficiente de anticongelante que impida que el motor y el radiador se dañen por efecto de la congelación del agua, asegúrate de usar el tipo de líquido adecuado para tus necesidades.





Ventilador eléctrico: Los vehículos modernos cuentan con ventilador eléctrico, este funciona cuando sube la temperatura sobre todo al manejar a baja velocidad. Si no funciona se puede deber a la falla en un contacto o un fusible dañado.

Alta temperatura: Si el vehículo tiene un alza de temperatura anormal, es posible que esté rota la correa del ventilador.

Baja temperatura: El agua congelada en temperaturas bajo cero, puede dañar el motor y radiador, por ello es importante que el líquido refrigerante contenga suficiente anticongelante para evitar posibles daños en el sistema.

El sistema de escape

Se trata del conjunto de elementos y conductos que facilitan la expulsión al exterior de los gases que se han generado en la combustión, con el fin de mejorar el rendimiento del motor y su sonoridad.

Estos gases de escape contienen sustancias tóxicas, entre ellas se encuentra el monóxido de carbono, un componente venenoso, incoloro e inoloro. Por esta razón, es muy importante revisar el correcto funcionamiento de este sistema, el cual es propenso a oxidación o que se estropee, provocando que este gas penetre en el interior del vehículo, lo mismo puede ocurrir, al conducir con el portaequipaje abierto. Los primeros síntomas de intoxicación con monóxido de carbono, son el dolor de cabeza y los vómitos. A la menor señal de intoxicación, sal del vehículo y respira aire fresco.



Un ruido anormalmente alto del tubo de escape suele ser una señal de roturas o de orificios en el silenciador.

La transmisión

El Motor trasmite la energía a través del embrague y la caja de cambios a la tracción y las ruedas. Existen vehículos de tracción delantera, trasera y ambas.


El embrague

Al presionar el pedal de embrague se desconecta la transmisión en el sistema que se encuentra entre el motor y la caja de cambios, en ese momento no se transmite la energía y es posible pasar cambios y volver a conectar el embrague soltando el pedal.

Al conducir presionando el pedal durante un tiempo extenso se disminuye el control sobre el vehículo.

funcionamiento sistema de embrague

La caja de cambios

Su función es multiplicar la fuerza del motor. Puede tener hasta 6 marchas. Cada marcha corresponde a un rango de velocidad, manejar a velocidad adecuada a la marcha contamina menos y ahorra combustible.

Los vehículos con caja de cambios automáticas no tienen embrague.

La Dirección 

El sistema de dirección se encarga de transmitir el movimiento del volante hacia las ruedas. Para que este proceso requiera el mínimo esfuerzo humano, existe un mecanismo auxiliar llamado servodirección.

Debes saber que la dirección se desalinea con mayor rapidez cuando el vehículo es sometido a sobrecargas, así como cuando topa contra el borde de una solera u otro obstáculo, o cae en hoyos.

Esto provoca que las ruedas produzcan vibraciones y aumente el desgaste de los neumáticos. Algunas de las señales que te indicarán si hay algún defecto en la dirección, o poca presión de aire en los neumáticos delanteros, son: sentir la dirección pesada, escuchar un chirrido excesivo al doblar o, si al conducir por un terreno plano, el vehículo tiende a irse hacia un lado.


La suspensión y la amortiguación

 Estos sistemas son los encargados de mantener en todo momento el contacto entre los neumáticos y la superficie de la calzada, garantizando la estabilidad del vehículo y proporcionando confort a la persona conductora. Estos sistemas tienen un papel clave para mantener la trayectoria deseada además de absorber las irregularidades del asfalto.

Dada su relevancia para nuestra seguridad y la de las demás personas, es importante aprender a supervisar estos sistemas e identificar posibles problemas. Consulta al mecánico si presentan algún indicio de avería

Peligros y consecuencias de amortiguadores en malas condiciones:

  • El automóvil no posee estabilidad especialmente en curvas, con viento lateral o al circular sobre una superficie con agua aumenta el riesgo de aquaplaning.
  • Mayor es la distancia de frenado, sobre todo con calles irregulares o mojadas. Si además, el vehículo tiene ABS, este sistema perderá efectividad.
  • Provocan averías con mayor frecuencia en otros elementos del vehículo.
  • Disminución del confort durante la conducción. La fatiga aparece con mayor facilidad en quien conduce.

Identificar señales de amortiguadores en mal estado:

  • Al frenar, el vehículo se inclina hacia adelante y se levanta de atrás de forma excesiva.
  • Al circular, el vehículo se balancea demasiado en carreteras en buen estado y se inclina excesivamente al tomar una curva. 
  •  Al cargar un extremo lateral frontal, el vehículo rebota u oscila
  • Durante la marcha, se notan significativamente las alteraciones del camino (por ejemplo, los baches) y el viento lateral.
  • Los neumáticos se desgastan irregularmente.
  • Circulando de noche, las luces oscilan de forma llamativa.
Es importante cambiar los amortiguadores por los indicados por el fabricante, estos deben ser cambiados cuando no sean seguros.

Los frenos

El sistema de frenos permite reducir la velocidad del vehículo llegando incluso a su detención, por tanto, es importante efectuar una supervisión y mantenimiento de ellos y saber cómo reaccionar ante una falla total, para evitar un siniestro de tránsito. 


Todos los vehículos tienen dos sistemas de frenos, que actúan independientemente uno del otro:

 1. El freno de servicio (pedal de freno) generalmente es hidráulico y actúa sobre las cuatro ruedas. Los vehículos         antiguos tienen solo un sistema de circuito hidráulico, lo que hace que si la tubería del freno se rompe en algún lugar, todo el fluido desaparece, y con ello el efecto de frenado en todas las ruedas. En cambio, los vehículos modernos están equipados con sistemas de frenos de dos circuitos. Así, si se produce una falla en un circuito, se mantiene cierto efecto de frenado en el otro.

 2. El freno de estacionamiento (freno de mano) es mecánico y generalmente actúa sobre las ruedas traseras. Muchos automóviles poseen un sistema de servofrenos, que aumenta considerablemente la fuerza de frenado. Esta tecnología funciona sólo con el motor en marcha. Por eso hay que tener cuidado al ser remolcado o si el motor se detiene en una bajada. 

Es importante saber que a temperaturas bajo cero es conveniente hacer pruebas de frenado a baja velocidad. Si circulas por una calle inundada, o si has lavado el vehículo recientemente debes eliminar, también frenando, la eventual humedad en los tambores, especialmente si el vehículo ha estado estacionado. 

Además, debes saber que existen 2 tipos de frenos, los convencionales y los frenos antibloqueo o ABS. Estos funcionan de forma distinta por lo que es de suma importancia saber qué tipo de frenos tiene el vehículo en el que te desplazas.

 Ante una situación de emergencia, donde es necesario detener el vehículo lo más rápido posible, se debe considerar que uno de los mayores riesgos ante una frenada brusca es que las ruedas del vehículo se bloqueen y se deslicen sobre el pavimento. Cuando esto ocurre la distancia de frenado aumentará notablemente. Además, en estas condiciones es imposible controlar la dirección del vehículo, por lo que hay una gran probabilidad de que no se pueda evitar el obstáculo.     

                    

 

Es importante que usted controle:

  •  El nivel del líquido de frenos periódicamente, según las indicaciones del fabricante. Este no se consume, por lo tanto, si disminuye es porque hay algún defecto mecánico. Además, si el nivel es bajo puede causar un siniestro.
  • Que la carrera del pedal de freno no sea demasiado larga. Lo aceptable es que usted pueda presionar el pedal hasta más arriba de la mitad de su distancia al piso.
  • Que la posición del pedal no descienda cuando lo tiene fuertemente presionado. Si pasa esto, puede haber fugas.
  • Que el pedal se sienta rígido y no elástico. Si el pedal cede en su punto de presión, puede ser por la presencia de aire al sistema.
  • Que las luces de freno funcionen.
  • Que el freno de mano funcione correctamente. Este debe mantener el vehículo quieto en una pendiente o impedir que se pueda poner en marcha con el freno puesto.
  • Que los frenos actúen en forma pareja sobre las cuatro ruedas. En una frenada intempestiva con frenos mal ajustados, el efecto irregular puede hacer que el vehículo se desvíe hacia un costado.

Baja temperatura y humedad:

  • A temperaturas bajo cero es beneficioso hacer pruebas de frenado a baja velocidad.
  • Si conduce por calles mojadas o inundadas o después de haber lavado el auto, debe tener especial cuidado con los frenos, puesto que se exponen a cambios de temperaturas.

Recomendaciones para evitar fallas en los frenos

 Si bien algunas de las verificaciones recomendadas puedes efectuarla tú, en otros casos debes acudir a un taller mecánico.

  • Grietas: Revisar posibles grietas en las mangueras por las que circula el líquido de frenos, vigilando que no existan manchas en el suelo por fugas.
  • Liquido de freno: Cambiarlo por completo en base a las indicaciones del fabricante.
  • El estado de discos y pastillas de freno. Debes revisarlos periódicamente y prestar atención ante ruidos producidos por su uso.

Los sistemas de servofrenos aumentan notoriamente la fuerza de frenado. Este servo freno funciona solo con el motor en marcha, por tal motivo hay que tener cuidado cuando el vehículo no está en funcionamiento, por ejemplo, al ser remolcado.

Revisa los fluidos del vehículo periódicamente 

Revisar los fluidos de un automóvil, como el lubricante del motor, el refrigerante y el líquido de frenos, es fundamental para mantener su buen funcionamiento y prolongar su vida útil. El aceite de motor lubrica las piezas internas, evitando el desgaste excesivo; el refrigerante regula la temperatura, previniendo el sobrecalentamiento, y el líquido de frenos garantiza una respuesta de frenado segura. Un nivel bajo o la falta de estos fluidos puede causar graves daños al motor, problemas de seguridad, siniestros y costosas reparaciones. Realizar una revisión periódica asegura que el vehículo opere de manera óptima y confiable en todas las condiciones de manejo.



Los neumáticos

 Los neumáticos son el único punto de apoyo del vehículo con la calzada, por esto, es de vital importancia controlarlos regularmente. 

 El agarre de los mismos aporta la seguridad necesaria bajo cualquier condición meteorológica, incluso en situaciones difíciles.

  • Los dibujos o surcos de sus bandas de rodamiento deben tener una profundidad aconsejable mínima de 3 mm.
  • Cuando la profundidad de tales dibujos es muy baja (inferior a 1,6 mm) baja la fricción con el pavimento mojado, aumentando el riesgo de que se pierda el contacto con el pavimento por causa de la capa de agua que se forma delante de los neumáticos.
  • Revise habitualmente sus neumáticos y compruebe que sus detectores de desgaste de la profundidad de los surcos no le indiquen que ésta es inferior a 1,6 mm.
De los distintos elementos de un vehículo, los neumáticos son los que requieren mayor revisión de parte de la persona conductora.

Presión de aire y desgaste:

Es importante revisar habitualmente la presión de aire de los neumáticos, esta debe ser constante durante todo el año. Cuando hay problemas de alineamiento o de amortiguación se apreciará un desgaste irregular, tal vez por conducir con una presión de aire inadecuada. Para evitar que el vehículo patine, debe mantener la presión que indica el fabricante.




Desgaste notorio:

Cuando hay desgaste al centro del neumático en la banda de rodamiento, se entiende que han trabajado con exceso de aire. Si el desgaste es solo por los extremos, entonces se ha utilizado menor presión que la requerida.

Baja presión de aire:

Si en una de las dos ruedas traseras hay baja presión aumenta la tendencia al giro. Con baja presión en las ruedas delanteras la dirección se torna pesada. Una rueda delantera con baja presión tuerce el vehículo hacia un lado.

Adherencia:

 Con una presión de aire demasiado alta, Se pierde la adherencia de los neumáticos.

Estado de los neumáticos:

Para la mejor estabilidad posible, los mejores neumáticos deben estar en la parte trasera del vehículo, sin importar donde está la tracción.

El razonamiento detrás de esto es que los neumáticos traseros son cruciales para mantener la estabilidad del vehículo en curvas y condiciones resbaladizas. Si los neumáticos traseros están desgastados, pueden perder tracción más fácilmente que los delanteros, lo que puede llevar a un sobreviraje donde la parte trasera del vehículo tiende a deslizarse hacia afuera. En cambio, si los neumáticos delanteros están más desgastados, el vehículo puede subvirar (continuar en línea recta en lugar de girar), lo cual es generalmente más controlable.

Presión en invierno:

La vida útil de los neumáticos disminuye cuando se baja la presión, por debajo de lo indicado por el fabricante, en invierno.

Recomendaciones importantes:

  • Presión: debe ser controlada cuando estén fríos los neumáticos, si se ajusta cuando están calientes luego marcarán una presión menor y aumentará el riesgo de patinar. (Cuando conduces, los neumáticos se calientan debido a la fricción con el camino, lo que hace que el aire dentro de ellos se expanda y aumente la presión interna. Si ajustas la presión mientras los neumáticos están calientes, podrías terminar con una presión más baja de lo recomendado una vez que se enfríen.)
  • Banda de rodadura: debe ser revisada periódicamente, no debe presentar cortes profundos ni grietas.
  • Velocidad moderada: alarga la vida de los neumáticos.
  • Desgaste: carga, pavimentos en mal estado y clima caluroso, son los principales elementos que aceleran el desgaste.
  • Desbalanceo: Es posible percibirlo cuando el vehículo presenta vibraciones o anormalidades en los neumáticos. En estos casos debe consultar a un profesional.
  • Cambio: al menos cada 5 años, pues aunque no lo aparenten, el material se envejece y desgasta lo cual puede ser peligroso. Es importante contar con asesoría profesional para cambiarlos.
  • Veredas: pueden producirse deformaciones en las llantas y cortes o roturas en los neumáticos, si sube escalones o veredas con su vehículo.
  • Carga: cuando lleve una carga muy pesada, debe aumentar levemente la presión.
  • Repuesto: Mantenga la rueda de repuesto con la presión mas alta, según el fabricante.
Importante:
Si va conduciendo y revienta un neumático trasero debemos virar el volante hacia el lado en que se desvía la cola. En el caso que se revienta un neumático delantero mientras conduce, debe frenar suave afirmando el volante firme.



Las luces

Todos los vehículos deben estar provistos de focos y luces exteriores para poder ver y ser visto por las demás personas cuando se conduce en la oscuridad o cuando la visibilidad se encuentra reducida, así como para poder advertir al resto determinadas situaciones o la intención de realizar algunas maniobras.

Así, los automóviles y, en general, los vehículos motorizados de 4 o más ruedas, deben poseer los siguientes focos y luces exteriores:

Parte delantera: Dos focos que proyecten luces altas y bajas, dos luces de estacionamiento y dos luces destellantes de viraje.

Parte trasera: Dos luces de estacionamiento, dos luces destellantes de viraje, dos luces de retroceso, dos luces rojas fijas, dos luces de freno y una luz que ilumine la placa patente del vehículo.

Adicionalmente, debe contar con una tercera luz de freno ubicada al centro de la luneta trasera de los automóviles, jeeps, furgones, station wagon, camionetas y vehículos de transporte de escolares.

luces de un vehiculo

Asegúrese de que sus luces estén limpias, que funcionen y que sus focos de luces altas y bajas estén bien ajustados. Un mal ajuste puede encandilar a los demás usuarios de la vía y causar un siniestro.

Puede controlar que sus luces bajas no cieguen, para eso:

  • Estacione su vehículo en un lugar plano y a unos 10 m de una pared o algo similar.
  • Encienda sus luces bajas y luego verifique que el alto de la luz proyectada en la pared sea inferior a la altura de los faros respecto del nivel del suelo.


Luces de advertencia de peligro

Estas luces deben ser usadas solamente cuando el vehículo esta detenido por alguna falla:

  • Para señalar la interrupción temporal de la circulación
  • También para avisar a los conductores que vienen detrás suyo sobre alguna obstrucción o peligro
  • Su uso solo debe durar el tiempo necesario
  • Nunca deben usarse para estacionar de forma ilegal o peligrosa
Luces neblineras

Algunos vehículos, además de contar con las luces antes señaladas que son obligatorias, están provistos también de luces neblineras. Estas pueden usarse sólo cuando la visibilidad se encuentre considerablemente reducida, ya sea a consecuencia de la niebla o de una lluvia torrencial, y deben apagarse tan pronto mejore la visibilidad.

Testigos de luces 




Los espejos

Los espejos permiten a la persona conductora ver el tráfico que circula detrás de ella y a la derecha e izquierda del vehículo. La mayoría de los espejos laterales son convexos, por lo que las imágenes se visualizan más lejanas de lo que están en la realidad.

Ten presente que aun cuando tus espejos estén muy bien regulados, al conducir siempre existirá una zona sobre la cual no tendrás visión. Estos sectores son denominados puntos ciegos o ángulos muertos (en la imagen están indicados de color amarillo)



Debes tener especial precaución con las y los usuarios vulnerables, es decir, con peatones, ciclistas y motociclistas. Recuerda que estos no cuentan con una carrocería para protegerse y absorber el impacto de un siniestro de tránsito.


Antes de conducir

Es muy importante, para conducir de forma segura realizar revisiones periódicas de:

  • Cinturones de seguridad
  • Limpiaparabrisas
  • Ventilación
  • Líquido limpiaparabrisas
  • Neumáticos
  • Desempañador luneta trasera
  • Luces
  • Frenos
  • Espejos
  • Puertas
  • Bocina

Verifique los siguientes elementos:

  • Visibilidad: Cuenta con buena visibilidad a través del parabrisas delantero, luneta trasera y ventanas laterales. De lo contrario, active el ventilador, ajuste las boquillas del aire y encienda el desempañador de la luneta trasera.
  • Espejos: ajustados para lograr buena visibilidad hacia atrás y hacia los lados. Debe ver lo más posible de la calzada y de los vehículos que vienen detrás.
  • Puertas: Bien cerradas. Si van niños en el vehículo, compruebe que están sujetos a los sistemas de seguridad y no pueden abrir puertas ni controlar ventanas.
  • Emergencias: Debe llevar todo lo necesario, para casos de emergencia, como: dispositivos reflectantes, extintor de incendio, rueda de repuesto y herramientas necesarias para su cambio.
  • Calzado: Debe utilizar calzado que permita un adecuado control de los pedales.
  • Objetos sueltos: No debe llevar objetos sueltos en el vehículo, pues algún pasajero pueda salir dañado.
  • Puntos ciegos: Antes de arrancar compruebe sus puntos ciegos, mirando alrededor.


2.2 La energía y las leyes físicas

La energía del movimiento: fuerza de inercia

Tienes que tener en cuenta que las personas que se desplazan en un vehículo están sujetas a las leyes físicas del movimiento y sus consecuencias. Por ejemplo, un vehículo que se aproxima a una curva tiende a continuar su desplazamiento en línea recta. Al mover el volante del automóvil, estás desviando la trayectoria recta que seguiría a causa de la fuerza de inercia, sin embargo, si conduces a una velocidad demasiado alta, la fricción puede no ser suficiente para mantener al vehículo en la carretera.

Al aumentar la velocidad al doble, la energía del movimiento aumenta 4 veces, lo que hay que tener presente, por ejemplo, al acercarse a una curva, ya que costará más mantener la dirección.

Siempre recuerde al conducir:

  • Verificar con anticipación el estado del camino.
  • Estar atento a cualquier sorpresa mientras conduce.
  • Las hojas caídas, derrames de combustible, pérdidas de aceite, provocan que el pavimento sea resbaladizo.
  • Al enfrentarte a una curva, reduce la velocidad con tiempo antes de que comience la curva y acelera suavemente a la salida de la misma.
  • La magnitud de la fuerza centrífuga o fuerza lateral que en una curva tiende a sacar al vehículo de la carretera, depende directamente de la velocidad y de lo cerrada que sea la curva

La distancia de detención

La distancia de detención es la suma de la distancia de reacción y la distancia de frenado.

La Distancia de Detención (S) = la Distancia de Reacción (R) + Distancia de Frenado (F):



Deberemos tener en cuenta:

  • La distancia de reacción depende del tiempo de reacción de la persona conductora y de la velocidad del vehículo.
  • Un tiempo normal de reacción es un 1 segundo.
  • Un ejemplo un vehículo que circula a 36 km/hora recorre 10 metros en un segundo, 20 metros si lo hace a 72 km/hora, etc.
  • Además, existe la variable relacionada a la experiencia en conducción, que permite tener mejores tiempos de reacción. 
  • Los nuevos conductores tienen un tiempo de reacción mayor, debido a su falta de experiencia suelen dudar.
  • La forma más fácil de sacar la distancia de reacción es multiplicar por 3 la primera cifra de la velocidad.

Distancia de Reacción: es la distancia que recorre un vehículo desde que el conductor percibe un estímulo hasta que responde al mismo pisando el freno.

La Distancia de Reacción (R) aumenta con:
  • La edad
  • La fatiga y la somnolencia
  • Consumo de alcohol y drogas
  • Algunos medicamentos
  • La temperatura del interior del vehículo
  • Distracciones (celular, tabaco, GPS)


Puedes estimar aproximadamente la distancia de reacción, multiplicando por tres la primera cifra de la velocidad. Este ejercicio es válido hasta los 99 km/h. Para velocidades sobre 100 km/h, debes considerar los 2 primeros dígitos (ver imagen de referencia).

La distancia de frenado es la distancia que recorre el vehículo desde que se presiona el pedal de freno hasta su detención total. Esta depende de la velocidad, del estado de la calzada, de la pendiente, del estado de los frenos y neumáticos, y de la forma de frenar.

 La distancia de frenado crece al cuadrado con el aumento de la velocidad. Así, si duplicas la velocidad, la distancia de frenado aumenta cuatro veces; si la triplica, la distancia de frenado aumenta 9 veces, etc.




En cuanto a la forma de frenar, hay varias maneras. La persona conductora que planifica su conducción disminuyendo a tiempo la presión sobre el acelerador y reduciendo su velocidad, hace menos uso del pedal de frenos y aumenta su seguridad.

En situaciones inesperadas es necesario saber frenar correctamente. Ya se ha señalado que las ruedas atascadas impiden guiar el vehículo. Por ello, al comenzar a frenar se debe presionar el freno con la mayor fuerza posible.

Si el vehículo no cuenta con frenos ABS y se bloquean las ruedas, hay que reducir en seguida la presión sobre el pedal de freno soltándolo.

  • Distancia de Frenado: es la distancia que recorre un vehículo desde que el conductor pisa el freno hasta que logra detenerlo.
  • ¿Cómo se calcula la Distancia de Frenado?
  • Es posible realizar el cálculo de varias formas, te presentamos los dos métodos muy comunes, en orden de dificultad.
  • Método 1: Cálculo Distancia de Frenado “Multiplicar por 5”
  • La forma aproximada más simple para calcular la Distancia de Frenado de forma mental el día del examen teórico de conducción es multiplicar la primera cifra de la velocidad por 5.
  • Ejemplo método 1:
  • 1. Un vehículo se desplaza a 90 km/h
  • Cálculo: 9 x 5 = 45m.
  • La Distancia de Frenado recorrida por un vehículo que se desplaza a 90 km/h es de 45 metros aproximadamente.


  • Método 2: Cálculo Distancia de Frenado “Primer digito al cuadrado, dividir por 180 y multiplicar por 100”
  • Este método es más complejo y tal vez difícil para utilizar el día del examen teórico de conducción, pero puede ser más exacto. Consiste en elevar el primer dígito de la velocidad al cuadrado, dividir por 180 y luego multiplicar el resultado por 100.
  • Ejemplo método 2:
  • 1. Un vehículo se desplaza a 70 km/h
  • Cálculo: 7 x 7 = 49 ÷ 180 = 0,272 x 100 = 27
  • La Distancia de Frenado recorrida por un vehículo que se desplaza a 70 km/h es de 27 metros aproximadamente.

    .

    La Distancia de Frenado (F) aumenta con:
    • La velocidad a la que circula
    • La masa del vehículo
    • La carga y su colocación
    • El estado del vehículo
    • Las condiciones de la vía
    • Las condiciones meteorológicas

    Ejemplo y recomendación:

    • Velocidad 60 Km/Hora, Distancia de Reacción 6 X 3 = 18 Metros
    • La distancia de frenado crece con el cuadrado del aumento de la velocidad. Así, si usted duplica la velocidad, la distancia de frenado aumenta cuatro veces; si la triplica, la distancia de frenado aumenta 9 veces, etc.
    • Por ello, es muy importante planificar sus viajes, para evitar frenadas bruscas y así ahorra desgaste de frenos y aumenta su seguridad.


    La fuerza de gravedad

    Si alguna vez ha tratado de frenar una bicicleta cuesta abajo, ha experimentado las fuerzas que dificultan la detención. De la misma forma sucede con los vehículos. Por ello:

    Tiempo: Tómese tiempo para bajar pendientes pronunciadas y siga todas las señales e indicaciones.

    Marcha (cambios): Para que no se calienten los frenos, en ocasiones es necesario manejar en una marcha (cambio) baja.

    Recuerda nunca desenganchar el motor ya que pierdes el control del vehículo.

    Características de los vehículos y su influencia en la conducción

    Cada vez que maneje un vehículo por primera vez debe saber si tiene:

    • Tracción: delantera, trasera o cuatro ruedas, además de características de cambios y pedales.
    • Neumáticos: en buen estado.
    • Motor: la mayoría de los vehículos tienen el motor adelante, por ello tienden a girar menos.
    • Carga: Si lleva carga atrás perderá fricción, por ello deberá girar más. Al girar en 180º la parte trasera continuará hacia adelante. Esto es importante saberlo para comprender los riesgos que implica un desplazamiento del centro de gravedad.
    • 4x4:  Un vehículo con tracción en las cuatro ruedas proporciona una posibilidad de conducción considerablemente mejor en pavimentos difíciles. En lo demás, estos vehículos con tracción en las cuatro ruedas se comportan igual que el resto.
    • Presión neumáticos: el mayor o menor giro de un vehículo, depende en gran medida de la presión de los neumáticos.

    2.3 Elementos de seguridad 


          ELEMENTOS DE SEGURIDAD ACTIVA  
Son los sistemas que sirven para prevenir la ocurrencia de un siniestro de tránsito. Por ejemplo: neumáticos, frenos y luces
            ELEMENTOS DE SEGURIDAD PASIVA
Son los componentes de seguridad del vehículo que contribuyen a evitar o reducir las consecuencias de un siniestro de tránsito. Por ejemplo, el cinturón de seguridad y el airbag.





  • Anteriormente, se han revisado algunos de los elementos de seguridad activa. A continuación, conoceremos

    El cinturón de seguridad

    Los cinturones de seguridad tienen la función de salvar vidas y disminuir las posibilidades de sufrir lesiones en un siniestro. Además, brindan mayor comodidad, mejor control y contribuyen a reducir el cansancio.

     El uso de este elemento en los asientos traseros es obligatorio sólo si el vehículo tiene un año de fabricación 2002 o posterior.

    El cinturón de seguridad requiere ser utilizado de forma correcta, de no ser así, este dispositivo no protegerá de forma adecuada, y, además, puede ocasionar graves lesiones. 


    • Un Choque a 50 km/hora es como tirarse sin seguridad desde un piso 4.
    • Un Choque a 70 km/hora es como tirarse sin seguridad desde un piso 7.
    •  Chocar a una velocidad de 90km/h provoca los mismos efectos que una caída desde el piso 11
    • Utilice el cinturón de seguridad, este disminuye las muertes en siniestros de tránsito. Además, proporcionan mejor control y contribuyen a reducir el cansancio.
    • El pasajero que se ve impulsado hacia adelante desde el asiento trasero no sólo se lesiona a sí mismo, sino que también puede lesionar al conductor o a quien viaje en el asiento delantero.
    • Recuerde utilizar el cinturón de forma correcta, ya que de esta forma cumplirá su función en 100%.

                 


    Uso correcto del cinturón de seguridad

    Banda toráxica: cruza desde el punto superior del hombro hasta la cadera.





    - La banda toráxica debe pasar sobre la clavícula, a medio camino entre el hombro y el cuello, y debe descender por el centro del pecho

    Si está colocada sobre el cuello o sobre un pecho, puede provocar graves lesiones durante el siniestro.

    Si se coloca sobre el hombro, puede deslizarse hacia fuera durante el siniestro y reducir al mínimo su eficacia.



    Banda abdominal: entre los dos puntos inferiores de fijación





    - La banda abdominal debe colocarse sobre los huesos de la cadera, siempre por debajo del abdomen, incluso en el caso de una persona embarazada.

     Si se coloca sobre el abdomen, puede provocar graves lesiones internas durante el siniestro.



    Una vez abrochado





    - Una vez abrochado el cinturón, debes estirarlo ligeramente   hacia arriba para que quede bien ceñido a tu cuerpo.

    Siempre debes asegurarte de que no esté enganchado o     torcido y que el cierre esté en buenas condiciones.

    - Si el cinturón tiene holguras, recorrerás una mayor distancia durante el siniestro, pudiendo impactar contra el volante o el parabrisas.

     Si las bandas no están bien estiradas, el cinturón perderá eficacia y puede provocarte lesiones durante el siniestro.

     El uso adecuado del cinturón de seguridad evita el llamado efecto submarino, el cual se produce cuando la persona, durante el siniestro, se desliza por debajo de la banda abdominal.
     COMO EVITAR EL EFECTO SUBMARINO:
    - Siempre debes conducir en una postura adecuada; no reclinar el asiento en exceso, ya que no debes conducir “semi-acostado/a”. Recuerda siempre que una postura adecuada al volante facilita el buen funcionamiento del cinturón de seguridad.
    - Asegúrate de que el cinturón esté bien tensado. El efecto submarino aparece con mayor facilidad si el cinturón no está bien ajustado al cuerpo. Por esta razón también evita conducir con ropa de mucho volumen.
    - No pongas toallas o almohadones (tanto sobre el asiento como detrás de la espalda), o algunas fundas especiales. Todos estos elementos pueden favorecer el deslizamiento de la persona, anulando las características del asiento enfocadas a evitar el efecto submarino.
    - Ponte el cinturón de forma adecuada; si pones la banda abdominal de forma incorrecta, es más probable que te deslices por debajo de ella


    Las consecuencias del no uso del cinturón de seguridad no son individuales. Las personas que se ven impulsadas hacia   adelante desde el asiento trasero no sólo se lesionan a sí mismas, sino que también pueden lesionar a la persona conductora   o a quien viaje en el asiento delantero.

    Algunas personas conductoras se niegan al uso del cinturón de seguridad dando excusas que ponen en duda la eficacia de este elemento de seguridad pasiva. A continuación, analicemos algunas de estas:

    “No voy a sufrir siniestros, por lo tanto, no necesito usar el cinturón de seguridad” Nadie espera sufrir un siniestro de tránsito, pero el hecho de que no hayamos sufrido ningún siniestro no quiere decir que nunca vayamos a sufrir uno.

    “Sobrevivir a un siniestro de tránsito depende de la suerte o de la casualidad, por lo que el cinturón no es de gran ayuda” El estudio de miles de siniestros demuestra que las personas que no usan el cinturón tienen el doble de probabilidad de fallecer en ellos.

     “En caso de tener un siniestro, es mucho más seguro salir eyectado del vehículo” Si una persona sufre un siniestro y por no tener puesto el cinturón de seguridad sale eyectada del vehículo, la probabilidad de sufrir una lesión medular aumenta en un 1.300% y la probabilidad de resultar fallecida aumenta en un 300%, lo que demuestra claramente que es mucho más seguro quedar dentro del vehículo.

     “En muchos siniestros, las personas quedaron atrapadas dentro del vehículo por el cinturón de seguridad y fallecieron por no poder salir a tiempo” Los estudios y estadísticas revelan que cada 1 millón, sólo en un siniestro, llevar el cinturón de seguridad puede ser negativo. La experiencia demuestra que, por el contrario, en la mayoría de los siniestros el cinturón puede salvar la vida de las personas ocupantes del vehículo o evitarles graves lesiones.

     “El cinturón de seguridad no es necesario cuando se conduce por vías urbanas, donde la velocidad de circulación es baja”   Cerca del 80% de los siniestros con víctimas, ocurren en zonas urbanas. Por ejemplo, un golpe frontal a tan sólo 30 o 40 km/h   podría resultar mortal con facilidad si la cabeza de la persona impacta contra el parabrisas o contra el volante, lo que suele ocurrir con frecuencia.

     “Si el recorrido es corto, no hace falta ponerse el cinturón de seguridad” Ya hemos señalado que sufrir un siniestro siempre es   posible, por lo que es importante utilizar el cinturón en todos los desplazamientos. Además, la mayoría de los siniestros con   víctimas se producen a pocos kilómetros de sus casas.

     “Mi vehículo ya tiene muchos sistemas de seguridad, por lo que el cinturón no es tan importante” Ningún dispositivo de seguridad del vehículo es capaz de sustituir al cinturón, inclusive todos ellos están diseñados para funcionar de una forma complementaria al cinturón. Por ejemplo, si se activa el airbag en caso de una colisión frontal y no llevas puesto tu cinturón de seguridad, puedes sufrir graves lesiones cuando se infle la bolsa de aire.

     “El cinturón resulta incómodo” En la medida en que uses habitualmente tu cinturón de seguridad, desaparecerá esa   incomodidad inicial que algunas personas experimentan. Muchas personas con el tiempo llegan a sentirse incómodas e   inseguras, cuando no usan el cinturón de seguridad.

     “Durante el embarazo, no hay que utilizar el cinturón, ya que resulta peligroso para el bebé” Las personas embarazadas también deben ponerse el cinturón de seguridad, debido a que el riesgo de lesionar y perder el bebé durante un siniestro es mayor si no lo usan (por ejemplo, si ella golpea el vientre contra el volante).

    “En los asientos traseros no hace falta llevar el cinturón de seguridad” En un siniestro, las personas de los asientos traseros que van sin cinturón pueden salir eyectadas, pudiendo golpear mortalmente a las demás personas; su uso no sólo puede salvar su vida, sino también evitar que provoquen graves lesiones a las y los demás ocupantes del vehículo.

    Después de sufrir un siniestro, el cinturón podría estar dañado y su uso ya no ser   seguro. En este caso deberás reemplazarlo por uno nuevo. Revísalo después de alguna eventualidad.

    • El airbag

       El airbag es una bolsa de aire que se infla en apenas unas milésimas de segundo al producirse un impacto. Hay diferentes tipos: laterales, para la cabeza, frontales, traseros, entre otros. Además, existen distintos tipos de tecnología para que estos se activen ante un impacto.

       Es recomendable que, a la hora de adquirir un vehículo nuevo, te informes sobre la existencia de airbags en él y sobre el funcionamiento de los mismos.

      Este elemento de seguridad pasiva permite proteger a las personas ocupantes del vehículo de las siguientes formas:

       1. Frena suavemente el movimiento de las y los ocupantes, evitando que las fuerzas de deceleración produzcan daños en ellos, especialmente en la cabeza (por ejemplo, reduce la probabilidad de ocurrencia de lesiones cervicales).

       2. Evita el impacto de las y los ocupantes contra algunos elementos del interior del vehículo: el volante, el tablero, el parabrisas o las ventanas.

       3. Protege la cara y los ojos de los fragmentos de cristal u otros elementos que pueden desprenderse, por ejemplo, del parabrisas.

       Al producirse un siniestro, la bolsa de aire se infla a una velocidad de hasta 300 km/h, por lo que, si el cinturón no retiene a la persona y el airbag impacta contra ella antes de haber llegado a extenderse completamente, puede llegar a provocarle graves lesiones por la enorme fuerza del golpe.

       La eficacia del airbag frontal se basa en la combinación del uso del cinturón de seguridad, una buena posición de las manos frente al volante y la regulación del apoyacabeza al nivel de las orejas. Se ha estimado que el uso de airbag frontal en conjunto con el cinturón de seguridad puede llegar a reducir un 20% la probabilidad de sufrir lesiones mortales.



     Cuando el sistema de air bag presente fallas en su   estado   de reposo, se prenderá el testigo del airbag y   este debe ser   revisado a la brevedad.


                                

    • El airbag

      • Después de un siniestro: se deberá reemplazar el sistema de airbag aunque éste no se haya abierto.

      Los apoyacabezas

      Cuando un vehículo sufre un impacto por atrás es sometido a una aceleración hacia adelante, lo que provoca que el asiento empuje el cuerpo de la persona también hacia adelante. Si la cabeza de esta no se encuentra apoyada, oscila respecto del torso, lo que provoca un violento cambio de dirección en el cuello, que toma forma de “s” al principio y posteriormente se va hacia atrás. Este movimiento se denomina efecto latigazo.

      La forma de prevenir este efecto y las lesiones cervicales asociadas es usando los apoya cabezas. No utilizarlo correctamente podría desencadenar en un esguince cervical, una lesión muy peligrosa y mucho más frecuente de lo que pensamos. Este puede afectar a diversas estructuras del cuello, como los músculos, las articulaciones o los ligamentos, y trae como consecuencia dolores musculares y de cabeza, una disminución de la movilidad del cuello, vértigo o mareos, entre otras molestias, que con frecuencia podrían prolongarse algunos meses.

       En ocasiones las lesiones producidas por el latigazo cervical llegan a ser mucho más graves. Por ejemplo, si se dañan las vértebras cervicales, la persona podría llegar a sufrir algún tipo de discapacidad irreversible, como una tetraplejia.

       EL CORRECTO USO DEL APOYACABEZAS



    La posición exacta es detrás de la cabeza. El borde superior del apoyacabezas debe quedar situado entre el límite superior de la cabeza y la altura de los ojos. Esta posición debe ser ajustada a cada persona dentro del vehículo, en los asientos delanteros y traseros. Nunca debes ubicarlo por debajo de tu cabeza, esto produce que su efectividad se reduzca drásticamente. La separación entre la cabeza y el apoyacabezas debe ser la mínima posible y nunca superior a 4 cm

                  



    Test de la unidad (Premium)