Saber agarrar bien el volante de un auto, especialmente al realizar el viraje, es una de las primeras acciones que el futuro conductor deberá aprender en sus clases prácticas. Pero, ¿conoces cuál es la técnica recomendada? Te lo explicamos a continuación.
Manejar un vehículo no es complicado la mayoría del tiempo, pero hay momentos en que todo chofer debe tener las habilidades de realizar maniobras difíciles, y eso requiere saber cómo utilizar correctamente cada elemento de conducción.
¿Cómo pones tus manos en el volante? Gran parte de los automovilistas se guían por la comodidad, pero lo cierto es que existen posiciones que te permitirán realizar todo tipo de maniobras de manera más eficiente y segura.
A la hora de hablar acerca de cómo ubicar las manos en el volante del automóvil, hay diferentes posiciones según la maniobra que deseamos realizar.
Lo que todo automovilista debe saber, es que ambas manos deben ir sobre el manubrio, quitando una solo por el tiempo necesario para pasar un cambio o realizar alguna función corta. Jamás dejes cruzado un brazo sobre el otro.
¿Cómo pones tus manos sobre la superficie del volante? El volante no es plano, por lo que no basta con apoyar sobre él solo las palmas de tus manos, sino que también es necesario sujetarlo por su parte interior, así se mantiene mejor control sobre este.
El manubrio se agarra firmemente, con las manos y dedos presentes tanto en la forma interna como también externa del volante.
Evita hacer un puño apretado o sujetarlo con demasiada firmeza, ya que te expones a lesiones en caso de accidente, además de hacer que se cansen más rápido e incluso te molesten al conducir.
Para aprender a tomar el volante, hay que imaginárselo como un reloj análogo. Tu mano izquierda es el minutero, y tu mano derecha marca la hora.
Los expertos indican que la posición ideal es la de las 09:15. En caso de que la derecha sea el minutero y la izquierda la que marca la hora, tu reloj imaginario debe dar las 10:05. Esta es una posición de inicio y para cuando vas por una recta, y que se modifica al realizar maniobras.
Otra posición que recomiendan los expertos, es con la mano izquierda a las 09:00 y la derecha a las 3:00, queda en ti escoger la que mejor te acomode.
Es importante que tus brazos nunca se crucen al conducir, no importa el tipo de maniobra que estés realizando, y por supuesto, jamás quites tus manos del volante.
El mantener una buena posición de manos y brazos al conducir no solo facilita el manejo, sino que también evita heridas y lesiones en caso de choques, ya que absorberás mejor el impacto tanto del golpe como también del airbag al abrirse.
A la hora de virar, tendrás que mover el manubrio cambiando la hora que indicarán tus manos. Es importante que al girar tomes el volante con mayor firmeza y, de ser necesario estirar tus brazos, que sean tus muñecas las que queden flexionadas.
En curvas abiertas, el reloj debe moverse a las 10:20 u 08:20, según sea tu posición de inicio. Una vez que termines con el viraje, regresa a tu posición inicial de manera calmada.
En virajes cerrados, la posición dependerá según vires a la derecha o izquierda:
En caso de pequeños cambios de dirección que no incluyan curvas de importancia, mantén tus manos en la posición normal de volante que escojas.
En caso de tener que esquivar un obstáculo, ya sea un peatón, otro auto o un problema en el pavimento, tus movimientos serán más rápidos y bruscos ya que estás ante una maniobras repentina.
Lo ideal es llevar tu mano izquierda hasta las 02:00 girando el volante, para luego ubicar la derecha a las 07:00. A continuación, pasa tu brazo derecho por sobre el izquierdo rápidamente para llegar a las 10:00.
Una vez superado el obstáculo, regresa a tu posición habitual. No permitas que tus brazos queden cruzados sobre el volante.
No es solo importante saber dónde colocar tus manos por sobre el manubrio, sino que también que distancia debe existir entre el volante y tu cuerpo.
Lo ideal es una distancia de entre 25 a 30 centímetros de tu pecho, siempre con la espalda recta y la parte trasera de tu cráneo apoyado sobre el apoyacabezas.
Cada persona encontrará una posición que le acomode a la hora de colocar sus manos sobre el volante y que quizá difiera levemente de la que indican los expertos y eso está bien, lo importante es recordar que tus manos y antebrazos jamás deben quedar cruzados, y nunca quitar tus manos del manubrio.
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