La conducción defensiva es clave para reducir riesgos en la carretera. En este artículo te explicamos cómo anticipar peligros, mantener una actitud preventiva, y reaccionar adecuadamente ante situaciones inesperadas y aprende las técnicas esenciales.
Solo el año 2023, en Chile fallecieron 1635 personas y otras 20 mil quedaron lesionadas en accidentes de tránsito, y ello gracias a los elementos de seguridad de los vehículos, sino estaríamos antes cifras mucho mayores.
Por más que seas un excelente conductor que respeta todas las reglas de tránsito, igualmente te expones a peligros por la imprudencia del resto ¿Escuchaste hablar de la conducción defensiva?
Se trata de una forma de manejar que todos deberíamos adoptar. Te contamos de qué se trata y cómo puedes aplicarla en tu día a día.
Respetas las velocidades máximas, conocer las señales de tránsito y qué hacer ante cada una de ellas, señalizar cuando se debe, etc.
En teoría, el conducir poniendo en práctica estas acciones nos convierte en un chofer seguro, pero al salir a la selva que son las calles de Chile, no damos cuenta que las cosas no son tan perfectas.
Por eso es tan importante aprender sobre conducción segura y cómo implementarla, ya que por más que tu seas un chofer modelo, lo más probable es que una buena cantidad de los conductores con los que debas encontrar manejen sin respetar las reglas y de manera agresiva, por lo que debes aprender a aplicar la llamada conducción defensiva.
La conducción defensiva es una estilo de manejo consciente, en que se toman todas las precauciones posibles ante las acciones peligrosas que puedan realizar otros vehículos, así como también estar siempre listos a realizar maniobras de emergencia para evitar posibles colisiones accidentes ante la imprudencia del resto.
Si bien es un estilo de conducción, el manejo defensivo también requiere un planteamiento psicológico diferentes al subirnos al vehículo.
Por más que nos moleste la prepotencia del resto y no queramos que se salgan con la suya, es mejor dejar el espacio para que vehículos que vienen conduciendo mal o de forma peligrosa nos pasen, y evitar tocar la bocina o llamarles la atención, ya que podríamos llevarnos algo más que un par de malas palabras.
Como dijimos recién, la conducción defensiva es una serie de comportamientos al volante que van desde precauciones, acciones e incluso nuestra respuesta y estado psicológico al conducir, pero hay bases que te pueden ayudar a convertirte en un excelente conductor defensivo.
La conducción a la defensiva no es solo una forma de manejar, sino que también implica actitudes y acciones precautorias, algunas parecen básicas, pero otras no las solemos considerar tan seguido.
La conducción defensiva salva vidas, y a medida que empieces a practicarla te irás acostumbrando y la harás parte de tu día a día, mientras circulas por la selva que son las calles, carreteras y autopistas chilenas.
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